jueves, 12 de julio de 2012

EL TAO



EL TAO 


el sentido que puede expresarse 
no es el SENTIDO eterno.  
El nombre que puede pronunciarse  
no es el nombre eterno.  
El "No-ser" es el comienzo de Cielo y Tierra,  
y el "Ser", la Madre de los seres individuales.  
El camino del No-ser  
lleva a contemplar la maravillosa esencia,  
el del Ser,  
a contemplar los espacios limitados.  
Originalmente, los dos son uno,  
su única diferencia radica en el nombre.  
La unidad de ambos se denomina misterio.  
El enigma más profundo del misterio  
es la puerta por donde entran todas las maravillas.




miércoles, 11 de julio de 2012

LA SONRISA INTERNA


                                      La Sonrisa interna 

                    "Descubriendo el amor propio en nuestro cuerpo"

Sonreír es una gran herramienta para la curación interior: libera endorfinas que estimulan el sistema inmunitario. La meditación taoísta de la Sonrisa Interna permite activar el amor por el propio cuerpo. Aplicada a los órganos sexuales resulta efectiva para fortalecerlos. Practícala con regularidad:
  • Relájate y respira profundamente sentada en postura de meditación.
  • Con los ojos cerrados lleva la atención a las plantas de los pies. Siente la conexión con la tierra y la energía que atraviesa tus pies, asciende por las piernas y llega hasta tu abdomen.
  • Visualiza un rostro radiante a un metro de distancia. Sonríe y siente esta energía amorosa que entra por el tercer ojo.
  • Sonríe a tu ombligo y siente que la energía radiante desciende por la parte frontal de tu cuerpo hacia tu centro abdominal, a unos 4 centímetros por detrás del ombligo. Si colocas la palma ahuecada a la altura del ombligo recibirás más fácilmente la cascada de energía que se desprende de tu rostro radiante.
  • Tócate el corazón con las puntas de los dedos. Sonríele e imagina que se abre como una rosa floreciente de amor. Siente cómo irradia esta energía por todo tu cuerpo.
  • Vuelve a llevar energía amorosa a tu ombligo y siente cómo fluye hasta él desde el corazón.
  • Sonríe a tus órganos genitales mientras te tocas el vientre y la pelvis con las manos. Siente tu útero, ovarios y clítoris plenos de energía y amor en tu interior. Siente amor por tus genitales.
  • Lleva la energía amorosa de tus órganos sexuales a tu ombligo. Haz girar la energía de los mismos mezclándola con la energía del corazón. Comienza en el centro del ombligo y visualiza una espiral que primero gira hacia fuera y luego hacia dentro. Para favorecer su absorción puedes mover la energía frotándote el abdomen con la mano.